La Procuraduría General de Justicia (PGJ) informó que al menos tres niños migrantes fallecieron ahogados después de que la lancha en la que viajaban con sus padres naufragó en la Costa de Chiapas.
El accidente ocurrió el pasado miércoles 20, pero hasta anoche el Instituto Nacional de Migración (INM) y la PGJ confirmaron el hallazgo de los cuerpos de los tres niños de origen salvadoreño, que uno a uno fueron expulsados por las olas del mar y localizados por los lugareños.
La noche de ese mismo miércoles, el juez rural de la Barra San José, municipio de Mazatán, hizo una llamada al 066 y reportó que cuatro personas que salieron del mar informaron que la lancha en que viajaban había naufragado y tres menores estaban desaparecidos.
La búsqueda de los niños inició la mañana de ayer. El cadáver del primero se encontró en la playa de la Barra de San José, a la altura del panteón, y el segundo –con lesiones en el rostro– se halló en el ejido Brisas del Hueyate, municipio de Huixtla. Ambos infantes, del sexo masculino, tenían alrededor de 10 años de edad.

Un tercer cuerpo sin vida se encontró la noche de ayer, pero hasta ahora no se ha precisado el género ni la ubicación exacta de donde fue localizado.
En comunicado, la PGJ precisó que los tres menores viajaban a bordo de una embarcación, acompañados de su padre, quien logró sobrevivir.
Indicó que los migrantes salvadoreños “eran transportados en una embarcación por traficantes de personas, pero la lancha volteó derivado de las fuertes lluvias”.
Y señaló que los Consulados acreditados de Centroamérica en Tapachula realizan la identificación de las víctimas.
En septiembre de 2015 la foto de Aylan, un niño sirio migrante de 3 años de edad, ahogado en la playa turca de Bodrum, se convirtió en un símbolo de la tragedia de los refugiados sirios que escapan de la guerra en su país e intentan llegar a Europa.