Al igual que el gobierno estatal, Ayuntamientos violan la ley al pedir préstamos sin control
Con la misma estrategia financiera del gobierno del Estado de Sinaloa, algunos municipios recurren a los créditos con la banca para solucionar sus problemas de gasto corriente, pero también con el mismo vicio del gobierno estatal, municipios como Culiacán violentan la Ley de Deuda Pública de Sinaloa al exceder el límite permitido para el endeudamiento.
Incluso, municipios como Guasave y Navolato, a quienes el Congreso del Estado propuso suspender la Cuenta Pública del segundo semestre de 2015 por una serie de irregularidades en la administración de los recursos públicos, utilizaron los créditos a corto plazo para lograr el pago de la nómina a sus empleados.
De acuerdo con datos obtenidos a través del Sistema Infomex para la información pública, las administraciones de Sergio Torres Félix, alcalde de Culiacán; José Luis Leyson Castro, alcalde de Guasave y Miguel Calderón Quevedo, presidente municipal de Navolato, contrataron créditos a corto plazo con la banca de 2014 a 2016.
La misma información fue solicitada a las administraciones de Ahome y Mazatlán, en un ejercicio que incluyó a los cinco principales municipios de Sinaloa, sin embargo, estos dos últimos respondieron que durante el trienio actual no recurrieron a dicho esquema financiero.
Culiacán, líder en deuda
En su primer año de gobierno, la administración de Torres Félix fue mesurada y sólo contrató dos créditos con Banregio por 70 millones de pesos, pero al siguiente año, los créditos casi se triplicaron al sumar un monto total de 245 millones 778 mil 770 pesos, repartidos en ocho contratos con Afirme, Lumo Financiera, Clear Leasing y Banregio.
En el último año del trienio, hasta mayo de 2016, la tesorería de Culiacán contrató 303 millones 896 mil 203 pesos a través de tres créditos con Banregio, Interacciones y Lumo Financiera.
Tal como se documentó en el reportaje “Endeudamiento desbocado” (Ríodoce 670, el pasado 26 de junio), las administraciones públicas exceden el tope máximo para contratar créditos a corto plazo, violentando el artículo 9 de la Ley de Deuda Pública de Sinaloa.
En el caso de Culiacán, los dos últimos años se contrataron préstamos que rebasaron por mucho el cinco por ciento permitido en la norma.
De acuerdo con los ingresos ordinarios calculados por la Auditoría Superior del Estado (ASE) en la última revisión a la cuenta pública de Culiacán, en 2015 la tesorería podía contratar por ley hasta 95 millones de pesos en créditos a corto plazo, el equivalente al cinco por ciento de los ingresos ordinarios; sin embargo, ese año Culiacán contrató un 12.8 por ciento. Al llegar 2016, el monto de créditos subió hasta un 14 por ciento.
Según la información que reportó el gobierno municipal, los créditos de 2014 y 2015 ya fueron liquidados y hasta mayo de 2016 se tenía un saldo pendiente de 170 millones 519 mil pesos.
A pesar de la violación a la ley, al igual que el gobierno estatal, el problema más grave de Culiacán es el total de su deuda pública, la cual se ha incrementado en los últimos tres años en un 24 por ciento, según reportó la ASE en su último informe.
Y es que la capital del estado es también la capital de la deuda pública en Sinaloa, al ocupar el primer lugar de entre los 18 municipios con mayor deuda y concentrar el 46 por ciento de la deuda total de los municipios sinaloenses, según la ASE.
A Culiacán le sigue Guasave, con un 15 por ciento de la deuda de los ayuntamientos; luego viene Mazatlán que acumula el 12 por ciento, y Navolato en cuarto lugar con un seis por ciento, según el análisis de la deuda pública que elaboró el órgano fiscalizador al cierre de 2015.
Navolato y Guasave sin dinero para nómina
El segundo y cuarto lugar de los municipios más endeudados fueron también en la semana que transcurrió señalados por el Poder Legislativo, al proponer que sean suspendidas sus cuentas públicas correspondientes al segundo semestre de 2015, por el número de observaciones de la Auditoría Superior del Estado que no fueron solventadas, además de reincidir en muchas de esas irregularidades.
Y es que además de las 97 observaciones que la ASE le hizo al gobierno de Calderón Quevedo y las 57 observaciones que acumuló la administración de Leyson Castro y que derivaron en la propuesta de suspensión de ambas cuentas, los dos gobiernos utilizaron, durante su trienio, los créditos con la banca para poder pagar la nómina.
Según la información que reportaron a través del Sistema Infomex, en 2014 Navolato requirió dos créditos con Banorte por 3 millones de pesos, al siguiente año se pidió un millón más y en 2016 se contrataron 6 millones 736 mil pesos con Banorte y Bancomer.
Para el caso de Guasave, de 2014 a 2016 contrató 19 millones de pesos a través de dos créditos con Banorte.
Según el análisis que realizó la ASE, al cierre de 2015, en el segundo lugar con más deuda en Sinaloa, Guasave acumulaba 487 millones de pesos y Navolato en un cuarto lugar tenía una deuda de 190 millones de pesos.
Top 5 en deuda pública:
Culiacán mil 451 millones 893 mil pesos
Guasave 487 millones 343 mil pesos
Mazatlán 388 millones 610 mil pesos
Navolato 190 millones 654 mil pesos
Ahome 137 millones 294 mil pesos
*Información del Análisis del Endeudamiento del Municipio 2015, elaborado por la ASE.
Los créditos de Culiacán
2014 70 millones de pesos 5% = 93 millones
2015 245 millones 778 mil (13 por ciento) 5% = 111 millones
2016 303 millones 896 mil (14 por ciento) 5% = 111 millones
*Artículo 9 de la Ley de Deuda Pública permite contratar créditos hasta un cinco por ciento de los ingresos ordinarios.
