El Colegio del DF (Perdón, de Sinaloa)

colegio de sinaloa 3
 
El reciente fallecimiento de José Ángel Espinoza, Ferrusquilla, ha dado pie para que el Colegio de Sinaloa lo sustituya por el sociólogo Roberto Blancarte, como antes Enrique Villa Rivera a Sergio Ortega.
Estas sustituciones no provocarían ningún comentario adverso si no fuera por la propensión que se tiene en el Colegio de promover principalmente a sinaloenses que viven y trabajan fuera del estado, y más específicamente, en la Ciudad de México.
Es decir, para ser parte colegiado además de vivir en el DF, es requisito estar en una institución de prestigio y ser palomeado por quien regularmente postula candidatos a esa distinción.
Se podrá argumentar que todos los que han sido incorporados son personalidades en su área de estudio y eso es suficiente para justificar la decisión.
Pero no siempre fue así. En su origen no se dejó de lado a quienes vivían y creaban en Sinaloa.
Recordemos a Antonio Haas, Antonio López Sáenz y hasta Ferrusquilla, que había abandonado Tlatelolco para venirse a vivir al cerro de la Nevería, en Mazatlán.
Pero de unos años acá la amplia mayoría reside en la capital de la República. De los quince colegiados sólo se salvan José Ángel Pescador, Élmer Mendoza, Federico Páez, Antonio López Sáenz y por su responsabilidad José Enrique Villa Rivera, presidente del Consejo Directivo.
De seguir afirmándose esta tendencia destinada a privilegiar la capital del país, el Colegio podría tener perfectamente su sede en la colonia del Valle o en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
Igual, se podrá argumentar que se distingue a la relevancia académica y artística de sus miembros y que no importa dónde resida cada uno de ellos.
Pero me parece que sí importa, porque en Sinaloa viven y crean personas que están a la par de la mayoría de ellos. Hay artistas extraordinarios y académicos que igual son nivel III del SNI y que al Consejo colegiado en ningún momento le pasa la idea de incorporarlos con plenos derechos.
Y es que, como va a ser posible eso, si los miembros de ese consejo tienen mayor oportunidad de encontrarse con sus pares en la capital, que en Culiacán, Mazatlán o Los Mochis.
Entonces, las propuestas no pueden salir más que de ahí; total, el reglamento en su artículo 12 señala “que las designaciones serán hechas por el Consejo Directivo conforme al procedimiento que libremente adopte”.
Y eso da una gran discrecionalidad y al mismo tiempo margina a los que no están en los pasillos de la ciencia y la cultura del DF.
Vamos, en el ánimo de quien propone las sustituciones por muerte ya que las otras causas previstas en el reglamento, hasta donde logro ver nunca han sido utilizadas, y cómo renunciar al reconocimiento en la patria estatal y al estímulo económico que sin ser el de un secretario de la administración pública tiene el atractivo de ser vitalicio.
Pero, además, el desarraigo reduce las potencialidades del Colegio. El Colegio de Sinaloa no creo que se repita en la UAS o en la U de O, menos en el Instituto de Cultura del Gobierno del Estado, sino se complementa, pero le haría mejores servicios si paulatinamente se equilibra entre quienes viven en Sinaloa y los que viven fuera de ella.
La distinción que en esta ocasión se hace de Roberto Blancarte, un mazatleco destacado, dedicado desde hace varios años al estudio de la iglesia católica, sin duda, es una buena adquisición sobre todo por su juventud y empuje mediático.
Es un académico progresista y eso hace bien a una institución, que por momentos está influida por la política, como lo vimos con la salida de la presidencia del Consejo de José Ángel Pescador y la llegada al cargo de José Enrique Villa Rivera.
El gobierno ahogó financieramente al Colegio y esto llevó a renunciar al ex Secretario de Educación Pública. José Ángel por ahí dijo luego que esperaba “le fuera mejor al Colegio” con la llegada de Villa Rivera.
Suponemos que le va mejor, aunque la actividad del Colegio ha disminuido sensiblemente y eso es otro tema que podría servir para una nueva entrega.
En tanto, bienvenido el nuevo colegiado, y lo otro es tarea para los colegiados.

Facebook
Twitter
WhatsApp
Email
  • 00
  • Dias de Impunidad
RÍODOCE EDICIÓN 1106
GALERÍA
Se desató el caos en los Emiratos Árabes Unidos después de que el país fuera testigo de las lluvias más intensas de los últimos 75 años, registrándose en algunas zonas más de 250 mm de precipitaciones en menos de 24 horas
COLUMNAS
OPINIÓN
El Ñacas y el Tacuachi
BOLETÍN NOTICIOSO

Ingresa tu correo electrónico para recibir las noticias al momento de nuestro portal.

cine

DEPORTES

Desaparecidos

2021 © RIODOCE
Todos los derechos Reservados.