Acusan intromisión del gobierno de Mazatlán en la selección de nueva dirigencia de constructores
El “boom” que vive actualmente el sector de la construcción en Mazatlán —gracias a las inversiones que ha traído la apertura de la carretera Mazatlán-Durango— no beneficia a todos, pues se concentra en unos cuantos, principalmente en el actual líder de la CMIC, Quel Galván, acusó Hugomar Peraza Ponce.
Peraza Ponce, quien encabeza una de las tres planillas que se integraron por primera vez en 50 años y que contienden por la dirigencia de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), cuestionó que Quel Galván pretenda reelegirse y las acciones que ha emprendido para conseguirlo.
El constructor fue más allá y dijo que “hay indicios de que el gobierno tiene metidas las manos en el proceso interno, a favor de la actual dirigencia”.
Acusó la aparente intromisión del gobierno en el proceso, pues hay indicios de que se está ofreciendo a los constructores obras pequeñas, de 150 a 200 mil pesos, a cambio de que voten por la permanencia de Quel Galván.
“Exigimos que si el gobierno municipal está dentro de este proceso, que saque las manos. A nuestros socios, les decimos que tomen la obra, porque estamos conscientes de lo difícil de la situación, pero que recuerden que el voto es secreto y que antes de emitirlo, hagan una retrospectiva de cómo han estado estos últimos años y quién se ha quedado con las grandes obras”, propuso.
Señaló el caso de la reunión sostenida con funcionarios del ISIFE (Instituto Sinaloense de la Infraestructura Física Educativa), cuyos directivos ofrecieron obras a cambio de reelegir a la actual administración.
En la reunión privada se puso a disposición de los socios de la CMIC un fondo de 650 millones de pesos para obras del ramo en el sur de la entidad, con el indebido señalamiento de que para lograr concretar el proyecto a lo largo del año, debe existir continuidad en la cámara.
Quel Galván respondió a las acusaciones de Peraza Ponce asegurando que él también se ha beneficiado con la distribución de la obra. Sin embargo, de acuerdo con los fallos publicados en Compranet, la última obra pública ejecutada por el contrincante del líder de la CMIC fue hace dos años, y por un monto de 646 mil pesos, con impuestos incluidos.
Peraza Ponce conminó a no desviar la atención de quién se quedó con dos grandes obras en la ciudad.
“Esta muy claro, se puede ver en las actas de fallo y con quienes compiten, se puede ver en qué posición están los participantes en las licitaciones y cómo se tiene que modificar para que esto quede en la persona… a modo.
Y es evidente que se está beneficiando al actual dirigente, él tiene obras conocidas, relevantes, dijo, como la alberca olímpica y la primera etapa del Centro de Seguridad Ciudadana, en donde se han invertido 35 millones de pesos, de cerca de 220 millones del proyecto, mientras que en la alberca se ejercieron 39 millones 245 mil pesos en la primera etapa.
Dijo que en los fallos se puede ver, como en el caso del Centro de Seguridad Ciudadana, el dirigente Quel Galván tiene a otros socios de CMIC como sus subordinados.
“Es una vejación a la clase empresarial de la industria de la construcción, que un dirigente tenga subcontratados a los empresarios que conforman la CMIC, esto se ve que es una opción, se puede ver , pero no es la más clara; se debió haber invitado para participar en un convenio para efecto de que todos sean corresponsables directos en ese contrato y puedan ellos comprometerse en toda la extensión y claro, también de recibir los beneficios en sus capacidades, en su especialidad de cada una de las empresas, de también tener resultados equitativos”, consideró.
No es bien visto, agregó, que “se tenga el dirigente subcontratados a sus agremiados, es incongruente, falta de respeto y creo que es el uso del poder”.
Las condiciones económicas han llevado a los agremiados a aceptar el trabajo que se les ofrece, y aunque las condiciones no son las mejores, se aceptan, comentó.
Aunque se presente documentación para concursar en la licitación de alguna obra, se está en desventaja ante el favoritismo que recibe el actual dirigente de la CMIC, expuso.
Y es que en Mazatlán, señaló, tanto la obra pública como privada está en manos de unos cuantos.
Se debe poner atención a esta situación, dijo, porque todos merecen las oportunidades que tiene una responsabilidad social por el compromiso que implica hacia sus trabajadores, que requieren prestaciones vigentes para una mejor calidad de vida.
