Pescadores denuncian en Profepa daño ecológico en el estero El Quelele por planta de amoniaco
El ex diputado federal secretario en la Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales en la Sexagésima Segunda Legislatura del Congreso de la Unión, Gerardo Peña Avilés y 14 residentes del Puerto de Topolobampo denunciaron ante la Procuraduría Federal de Protección del Ambiente (Profepa) desequilibrio ecológico, daños al ambiente y a los recursos naturales, además de actuaciones en contra de la ley por el relleno del estero El Quelele, para construir una planta de amoniaco.
La denuncia fue presentada en la Delegación Estatal de Profepa el 31 de agosto por el entonces legislador federal, como representante común de los líderes pesqueros Alfredo Zavala Huerta, Alejandro Álvarez Armenta, Rodrigo Palafox Corral, Román Navarro Rodríguez, Refugio Cervantes Leyva, Abel Orozco Domínguez, Jesús Reyna Bojórquez, Eginardo Álvarez Ahumada, Julián Ariel Calzada Cuadras, Jesús Traín Pérez, Juan Carlos Sánchez Soberanes, Ángel Antonio Zamora Moreno, José Enrique Cinco Hernández y Martín chaparro Pérez, que a su vez representan a casi 3 mil pescadores de Topolobampo.
La querella no inculpa a persona alguna, sino que va dirigida en contra de quien resulte responsable “… de hechos, actos y omisiones que han producido desequilibrio ecológico, daños al ambiente y a los recursos naturales, además por haber contravenido las disposiciones legales y demás ordenamientos”.
Los querellantes exigen a Profepa inspeccionar al lugar y verificar el impacto ambiental, así como el incumplimiento e inconsistencias presentes en el estudio de impacto ambiental, y derivado de ello clausurar temporal, parcial o total de las instalaciones, maquinaria o equipos, fuentes contaminantes, y sanciones administrativas correspondientes, y que en caso de algún delito ambiental se dé vista al Ministerio Público.
Incluso demandan se dé vista a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para que puede suspender o revocar la autorización del impacto ambiental por haber incumplido la norma.
Los denunciantes también exigen ser coadyuvantes en la resolución de la querella.
Los pescadores y su representante común señalan que se han “generado daños graves a los ecosistemas, a éstos como hábitat de flora y fauna silvestre, así como daños directos a la vegetación de humedal protegida y a ésta como un ecosistema forestal en sí.”
Los daños los ubican dentro de la bahía de Ohuira, designada Humedal de Importancia Internacional número 2025 desde el 2 de febrero del 2009. Las afectaciones al ambiente y la degradación de los ecosistemas, señalan, fueron al parecer ocasionados con la construcción del proyecto Planta de Amoniaco de 2200 TMPD, aprobado el 21 de abril del 2014 con el oficio SGPA/DGIRA/DG/03576.
Los daños fueron revelados con un estudio técnico levantado en el lugar el 14 de agosto del 2015, luego que pescadores ribereños amenazaran con paralizar el relleno del estero por considerar que destruía el manglar y amenazaba la reproducción de especies marinas, cuya pesca les ha sido concesionada durante décadas. Hasta ahora se han destruido 21 mil 285 metros cuadrados de mangle negro y mangle rojo, ambos protegidos por el artículo 60 de la Ley General de Vida Silvestre y por la Norma Oficial Mexicana NOM-022-SEMARNAT 2003 y que sirven como zona de anidamiento, crecimiento y alimentación de especies acuáticas y de nueve especies de aves migratorias.
El estudio técnico realizado a través de fotos digitales reveló que en el lugar se dragaron 10 canaletas de desagüe y desecamiento del espejo de agua que aún existe colindante con el mangle, lo que ha causado una pérdida de cobertura vegetal y de la salud del ecosistema.
El análisis, indica la denuncia, establece que las canaletas fueron realizadas entre el 2013 y previas a enero del 2014, en que se aprobó el proyecto de la planta de fertilizantes amoniacales.
El nuevo análisis técnico reveló que la Manifestación de Impacto Ambiental que sustenta la autorización SGPA/DGIRA/DG/03576 de la Planta de Amoniaco omitió la construcción de las 10 canaletas de desagüe y desecamiento del cuerpo de agua, el relleno con material pétreo del cuerpo de agua, la destrucción de individuos de manglar y la afectación con especies nativas y migratorias de las cuales omitió seis especies, entre otras irregularidades.
El nuevo estudio también dejó en claro graves fallas administrativas en que incurre el Ayuntamiento de Ahome al dar vigencia a las licencias de uso de suelo 153/2011 y 334/2014, emitidas el 27 de marzo del 2012 y 4 de junio del 2014,ambas sustentadas en planes de desarrollo urbano derogados.
