MÉXICO, DF, (apro).- El documental Operación leyenda, dirigido por Juan Frauto, sobre el asesinato de Enrique Kiki Camarena, se presentará este martes 7 a los medios, y su productora ejecutiva Arlette Garibay asegura que el filme “sacude, son 104 minutos muy intensos, muy interesantes, es un encontronazo tremendo, un shock de la realidad, es una cinta impactante.”
También son productores Héctor Berrellez y Juan Carlos Uribe. La idea del largometraje surge cuando Rafael Caro Quintero salió libre. La cinta contiene testimonios de los testigos protegidos, entre otros personajes.
“Se logran las entrevistas luego de una labor de convencimiento, y ellos deseaban sacar esa verdad que llevan cargando en su alma, moralmente es un gran desahogo. Ellos eran policías judiciales de la Federal del Estado de Jalisco y era muy difícil su situación porque estaban entre la espada y la pared, estaban del lado de la ley, pero al final, por órdenes de muy arriba, tenían prácticamente que defender a los delincuentes, estar de lado de los delincuentes y apoyarlos”, detalla Garibay.
También incluyeron dramatizaciones, por ejemplo, se recrea cuando matan y violan a unos seguidores de los Testigos de Jehová o cuando asesinan a turistas en el restaurante La Langosta, en fin.
El documental muestra en la pantalla lo que varias versiones periodísticas y libros han publicado sobre el caso de Kiki Camarena: que el crimen fue una ejecución concertada por políticos de México y Estados Unidos ante los descubrimientos del agente encubierto.
Para ella, “las nuevas generaciones se deben enterar de dónde y por qué se desata toda la sangre que se ha derramado y derrama en el país”.
Adelanta en entrevista a este medio que Operación leyenda va a incomodar a mucha gente que estuvo involucrada y que vive ahora felizmente una vida de ensueño tanto en México como en Estados Unidos.”
Hacia 1985, frente al Consulado de Estados Unidos en Guadalajara, fue raptado Camarena, agente encubierto de la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés). Hasta que fue hallado su cadáver con señas de tortura.
En México, Operación leyenda aún no tiene fecha de estreno.
También filmarán película que implica a funcionarios mexicanos
MÉXICO, D.F. (apro).- El documental Operación Leyenda que trata sobre el asesinato del agente de la DEA, Enrique Kiki Camarena, impactó a tal punto al hijo de Oliver Stone, Sean Ali, y al actor Charlie Sheen, que ahora desean filmar una ficción en torno de la muerte del investigador mexicano-estadunidense que aseguró, en 1984, un plantío de mariguana en el rancho “El Búfalo”, propiedad del narcotraficante Rafael Caro Quintero, prófugo de la justicia.
Actualmente, se encuentran en pláticas Héctor Berrellez, exagente de la DEA, y quien fuera responsable de la Operación Leyenda, como se le llamó a la investigación sobre la tortura y muerte del policía antidrogas.
Por ello, una unidad especial fue enviada para coordinar la indagación en México, debido a que había políticos implicados en el caso.
Los investigadores identificaron a Miguel Ángel Félix Gallardo, Ernesto Fonseca Carrillo y Rafael Caro Quintero como los principales sospechosos en el secuestro y asesinato de Camarena. Los dos primeros siguen en prisión y el último fue liberado en agosto de 2013 por presuntas violaciones al debido proceso. El fallo fue revertido y un tribunal ordenó reaprehender al narcotraficante, pero éste anda a salto de mata.
La película podría revelar la participación de políticos mexicanos que aún viven.
El narcotraficante Rafael Caro Quintero fundó el desaparecido Cártel de Guadalajara. El 19 de agosto de 2013 salió de prisión luego de pasar 28 años purgando la condena por el asesinato de Enrique Camarena Salazar.
Sin embargo, para la Interpol continúa en calidad de prófugo. De hecho, la DEA ofrece una recompensa de 5 millones de dólares a quien proporcione información para su captura.
Durante la presentación, Héctor Berrellez señaló al actual senador Manuel Bartlett —según una declaración ofrecida a la agencia de noticias china Xinhua— como uno de los asesinos intelectuales del agente estadunidense, cuando era secretario de Gobernación.