El número de muertos por la caída del avión en Malasia, aumentó  a más de 300 debido a las víctimas de la región en la que cayó, aunque no se ha determinado con exactitud. Además de que el presidente ucraniano ha urgido a una investigación para aclarar qué fue lo que ocasionó el trágico accidente.
Por su parte, el primer ministro de la República Popular de Donetsk, Aleksánder Borodái, rechazó la posibilidad de que las autodefensas tengan alguna relación con la caída del avión malasio.
“No disponemos de armas capaces de derribar un avión que vuela a 10 kilómetros de altura”, afirmó el funcionario.
“Si se trata de un avión de pasajeros no tenemos nada que ver con el caso”, dijo Borodái. El funcionario también recordó que Kiev cerró el espacio aéreo de Donetsk a los vuelos comerciales el 8 de julio a causa de los combates.
Tomado de Eje Central.