Acusa obrero que “patrón” gringo y abogados se niegan a pagarle demanda ganada

 

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Mientras el presidente de Estados Unidos Donald Trump proyecta extraditar a trabajadores inmigrantes de su país, aquí en Mazatlán su paisano Robert Keysors, coludido con el abogado Clicerio Díaz Guzmán, se niega a pagar una demanda laboral perdida ante la Junta de Conciliación y Arbitraje (JCA).

El técnico en refrigeración Javier Pérez Sosa, quien fue despedido “injustificadamente” del hotel Condominios Islas del Sol, el 22 de marzo de 2002, tiene 15 años luchando conforme a derecho para que le paguen.

“Yo lo único que pido es que me paguen lo justo, ni más ni menos”, asegura.

Alertado por las presuntas “mañas” desplegadas por los abogados al servicio de Robert Keysors, para no pagarle, teme que las marrullerías de éstos sean la antesala de la violencia física, razón por la cual hace responsables a los abogados Clicerio y Ricardo Díaz Guzmán, si algo le pasa a él o su familia.

El señalamiento también va dirigido para Robert Keysors, administrador de los condominios, pues éste, acoplado con los hermanos Díaz Guzmán, cambiaron la razón social de la empresa para no pagarle la demanda que ya les ganó.

Cuenta Pérez que el 22 de marzo de 2002 fue despedido por Bliss Pearson, el entonces administrador del hotel, a quien le ganó la demanda ante los tribunales, por lo que tuvieron que reinstalarlo como técnico en refrigeración.

“Me reinstalaron y a los dos días me volvieron a correr y les gané la demanda”, comenta.

Sostiene que el 6 julio de 2007 lo despidieron por segunda ocasión e interpuso la segunda demanda que sigue su curso legal y sólo faltaba que el presidente de la Junta de Conciliación y Arbitraje solicitara informes ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y el Instituto Mexicano del Seguro Social.

“Son los únicos documentos que faltan para que la demanda ya salga a proyecto, pero a raíz de las marrullerías del gringo y sus abogados yo no he podido cobrar la primera demanda que le gané en el 2007”, asegura.

Añade que no ha podido cobrar, porque los abogados Díaz Guzmán y Robert Keysors “mañosamente” hicieron una nueva empresa con la razón social Islas Vacacional A.C.,  para no pagarle y  evitar un embargo ordenado por la JCyA.

“Hace poco me enteré por medio de unos dueños de ahí del condominio, que a esa empresa no la reconocen como administradora del condominios Islas del Sol”, enfatiza.

Islas Vacacional A.C., tiene sendas demandas tanto por la vía civil como penal, interpuesta por un grupo de condóminos, que acusan a Robert Keysors de no tener facultades para ser administrador de los condominios.

Los dueños de los condominios pidieron a Inmigración que lo sacara del país pues no contaba con documentos legales para administrar dicho condominio.

“Con esa estrategia, indica el ofendido, Robert Keysors y sus abogados se burlan de las autoridades laborales y de los obreros afectados.

“Yo tengo unos documentos que me dio la Junta de Conciliación y Arbitraje, mediante  los cuales intentamos hacer el embargo, pero no pudimos embargar, porque ellos dijeron que no era ahí la empresa que buscábamos”, lamenta.

Añade que Robert Keysors y sus abogados interpusieron un recurso de revisión al que el presidente de la JCyA dio vista y en la audiencia celebrada al respecto ellos afirman que la empresa que buscaban no estaba ubicada ahí, argumentando que ellos representan a la empresa Islas Vacacional.

Cabe aclarar que, conforme a derecho, la JCyA le dio para atrás a los alegatos, pues ésta no los reconoce como representantes legales ante esas empresas.

“Ellos se tienen que amparar, tienen 15 días para evitar que se lleve a cabo el embargo, pero yo voy a seguir, para cobrar el laudo que me deben del 2007”, explica.

“Por ello, lo único que les pido a Robert Keysors y los abogados Clicerio y Ricardo Díaz Guzmán es que me paguen, no les pido otra cosa”, comenta.

El afectado afirma que del laudo finiquitado en forma legal, que quedó acordado por el tribunal laboral y que están obligados a pagarle, son 229 mil pesos de la primera demanda ganada que comprende desde 2002 hasta 2007.

“Ese laudo salió a favor mío con esa cantidad, eso es lo que estoy reclamando ahorita que me paguen”, aclara.

Según las cuentas sacadas de la segunda demanda que ha durado desde julio de 2007 hasta lo que va de 20017, suman la cantidad de 800 mil pesos.

Pérez Sosa asegura que tomando en cuenta el tiempo transcurrido desde 2002 hasta 2017, el monto de lo que le deben sus “patrones” asciende a un millón de pesos.

Cuenta Pérez Sosa que el abogado Clicerio Díaz Guzmán reclamaba con notoria molestia que por qué él estaba exigiendo 800 mil pesos de la segunda demanda, si todavía no se había resuelto ante los tribunales laborales.

El técnico en refrigeración respondió que quería negociar: “para que veas que vengo yo con ganas de negociar para que esto termine, dame 500 mil pesos, por la segunda demanda, con lo que me debes de la primera y cerramos el caso”, propuso Pérez Sosa.

El abogado Clicerio Díaz Guzmán se retiró de la JCyA argumentando que la oferta se la comunicaría a Robert Keysors, pero el obrero teme que los demandados regresen con artimañas  más “convincentes” para perjudicarlo.

 

 

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