Siete estados los más ‘burros’ de México

Francisco Olvera, gobernador de Hidalgo, y Emilio Chuayffet, secretario de Educación Pública, durante la presentación de la Campaña Nacional De Alfabetización y Abatimiento Del Rezago Educativo.
Francisco Olvera, gobernador de Hidalgo, y Emilio Chuayffet, secretario de Educación Pública, durante la presentación de la Campaña Nacional De Alfabetización y Abatimiento Del Rezago Educativo.

Siete estados del país concentran la mayoría de los 5.4 millones de personas que no saben leer ni escribir, pero ese no es el único problema de esas entidades, también destacan por tener el mayor número de jóvenes que no concluyen la primaria o secundaria.
Se trata de Veracruz, Estado de México, Chiapas, Puebla, Oaxaca, Guerrero y Michoacán, que son estados con un alto índice de pobreza, aunque su participación individual en el PIB nacional fluctúa entre el 1.5 y 9.2%, pero el elemento que hace inexplicable el nivel de retraso educativo, es que en por lo menos las cuatro primeras entidades tienen la mayor infraestructura educativa instalada de todo el país.
Al cruzar la información oficial sobre el número de maestros, el número de escuelas, el rezago educativo y el analfabetismo, se puede visualizar cómo el problema es estructural y sorprendente.
9 DE CADA 10 PESOS DEL PRESUPUESTO PARA LA EDUCACIÓN SE DESTINA AL PAGO DE NÓMINA DE SUS TRABAJADORES
La educación es uno de los ejes de gobierno de Enrique Peña Nieto y en su segundo informe de gobierno incorporará, como los primeros avances, la reforma educativa y el lanzamiento de la cruzada nacional para alfabetizar a 2.2 millones de habitantes y que arrancó la semana pasada, pero eso sólo atiende la epidermis del problema.
19 presidentes y nada
Hace 93 años, José Vasconcelos inició la primera campaña para enseñar a leer y escribir a 6 millones de mexicanos  –indígenas en su mayoría-, que venían  de la primera gran guerra civil del siglo XX.  Dos décadas después, Jaime Torres Bodet enfatizó los esfuerzos para combatir el analfabetismo que persistía entre la población, en medio del crecimiento económico que vivía el país.
Hoy en día, 5.4 millones de personas  viven en México sin saber escribir un recado correctamente; es decir, la cifra ha persistido a lo largo de 19 mandatos presidenciales distintos.
“El que no estemos reduciendo de manera significativa la cantidad de analfabetos quiere decir que nuestro sistema educativo sigue expulsando a muchos mexicanos, hasta el punto que no saben escribir un recado (…) y la fuente de ese analfabetismo es la incapacidad del Estado para dar educación”, aseguró Manuel Gil Antón, profesor del Centro de Estudios Sociológicos de El Colegio de México.
Datos del Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA) muestran que  la mayoría de la población de analfabetas que existen en el país se concentra en el sureste del país, donde también se ubican los municipios con la población que viven en situación de pobreza y pobreza extrema, según los reportes del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Y es que la desigualdad de la calidad educativa es paralela a la desigualdad de la pobreza, sostiene Gil Antón. “El grueso del analfabetismo está registrado en los estados del sur, el estado le está dando la peor educación a los que más lo necesitan”.
No basta leer y escribir
En una entrevista reciente en el programa El Primer Café, Alfredo Llorente Martínez, director del INEA, reconoció que la alfabetización de la población “no fue una prioridad para los gobiernos, dejó que se fuera agravando y tampoco se hacía nada firme para que cambiaran las cosas”.
Y es que la cruzada lanzada por el gobierno de Peña Nieto llega casi un siglo después de que arrancaran los programas históricos de Vasconcelos y Torres Bodet, y para lograrlo, la Secretaría de Educación Pública (SEP) enviará a un millón de voluntarios provenientes del programa Oportunidades y a los instructores comunitarios del Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe).
Pero “no basta con que estos jóvenes sepan leer y escribir para alfabetizar a alguien más, deben tener una preparación adicional”, sostiene Marisol Vázquez, investigadora del Programa Interdisciplinario sobre Política y Prácticas Educativas del CIDE.
El programa tiene que ser eficiente para que la población mantenga el interés en los cursos y realmente aprendan a leer y escribir.  Así, la pregunta que lanza la especialista es concreta: “¿qué van a hacer de diferente para que este programa sí funcione?”.
Tomado de Eje Central.

Facebook
Twitter
WhatsApp
Email
  • 00
  • Dias de Impunidad
RÍODOCE EDICIÓN 1108
GALERÍA
Policías jubilados y viudas de policías se manifestaron en palacio de gobierno, piden la homologación de sueldos y el pago justo a las viudas.
COLUMNAS
OPINIÓN
El Ñacas y el Tacuachi
BOLETÍN NOTICIOSO

Ingresa tu correo electrónico para recibir las noticias al momento de nuestro portal.

cine

DEPORTES

Desaparecidos

2021 © RIODOCE
Todos los derechos Reservados.