El problema de la violencia contra las mujeres en México no es un tema nuevo, es una situación que se ha acuñado desde hace muchas décadas y que hoy tiene un nicho que debe ser estudiado a profundidad para hacer algo en contra del sinnúmero de feminicidios que se están registrando en diferentes entidades federativas del país, como es el caso particular de Sinaloa, consideró la académica e investigadora de la UNAM, María Marcela Lagarde y de los Ríos.
Al disertar la conferencia Violencia de Género y Feminicidio, la etnóloga maestra y doctora en antropología destacó que México es uno de los países que presenta mayor violencia de género contra las mujeres en sus distintas modalidades, registrándose una taza de feminicidios altísima, calculada 2 mil casos al año.
Invitada por el Centro de Políticas de Género para la Igualdad entre Mujeres y Hombres de la Universidad Autónoma de Sinaloa, la representante del feminismo latinoamericano manifestó que el problema de la violencia contra las mujeres radica, principalmente, en que la organización social ha naturalizado la discriminación de las féminas, hecho que eleva y fortalece el supremasismo de los hombres.
Ante un buen número de estudiantes, docentes, trabajadoras, investigadoras y público en general, Marcela Lagarde y de los Ríos señalo que la tarea que tenemos los mexicanos con respecto a poner freno a la violencia de género y feminicidios es ardua, toda vez que se debe tener una transformación de todo lo que hacemos, de cómo se hace y, sobre todo, construir una conciencia de respeto a los derechos existentes de las mujeres.
La investigadora de la Universidad Nacional Autónoma de México, quien logró la creación de una Comisión Especial de Feminicidio en el Congreso para investigar el asesinato de mujeres en nuestro país, enfatizó que es lamentable que aun en nuestra sociedad se siga cultivando la educación de los hombres contra la violencia hacia las mujeres, quedando muy marcando el estado patriarcal donde todavía se generan políticas que elevan el supremasismo de ellos denigrando al género opuesto.
