Elementos de la Policía Comunitaria arribaron la mañana de este sábado a la comunidad de Petaquillas en el municipio de Chilpancingo, Guerrero, para encargarse de las labores de seguridad de esa zona acosada por la violencia. Pero minutos después llegó el Ejército mexicano y les pidió que se retiraran.
El lugar vive esta mañana momentos de tensión.
Alrededor de las 5:00 horas, un grupo de personas armadas con rifles calibre 22 pertenecientes al Frente Unido de Seguridad y Justicia del Estado de Guerrero se instaló en la carretera federal que conecta a esa localidad con Chilpancingo y mantuvo un retén hasta la llegada del Ejército.
De acuerdo con reportes de prensa local, los comunitarios, provenientes de El Ocotito, aseguraron que la ciudadanía les pidió su apoyo para hacer frente al crimen organizado.
Al menos 10 camionetas con militares permanecen en la carretera federal, donde un mando castrense mantiene un diálogo con los comunitarios para que regresen a su poblado.
Los policías comunitarios señalaron que llegarían 500 personas para ingresar al poblado de Petaquillas y advirtieron que permanecerían en el lugar aunque el Ejército los repliegue.
El Comisario Municipal de Petaquillas, Arquímedes Vargas Encarnación, dijo en entrevista a medios locales que la ciudadanía solicitó la presencia de la Policía Comunitaria debido a la ola de asesinatos que se han registrado en esta zona.
Dijo que los efectivos de la Sedena advirtieron a los comunitarios que si no se retiran los van a desarmar.
Pobladores de Petaquillas realizan en estos momentos una asamblea para respaldarlos. Mientras que en la comunidad se ve un fuerte dispositivo de seguridad por parte del Ejército. (Sinembargo.com)
