Para Paco Ignacio Taibo II no hay en México un Estado en crisis, pero sí el gobierno de Enrique Peña Nieto. Y también, dijo, la izquierda solapadora y mentirosa, como el Partido de la Revolución Democrática, que se ha convertido en el cuidador del patio trasero del gobierno y su partido, el PRI.
Taibo no deja sus cigarros cubanos, sin filtro, ni su coca cola de bote rojo. Está agotado luego de dos horas de charla sobre la historia de México y más de media hora adicional firmando libros y conversando con sus lectores. Despeinado, de buen humor, a ratos con sus chispazos de energía y luego como que se apaga y le gana la noche.
Son más de las nueve en La Paz, Baja California Sur, a donde el escritor, activista e historiador, acudió para hablar de su obra, como parte de las actividades de la Feria del Libro de esa ciudad, en la que escasea el chapopote y el mar siempre invita, y los peatones cobran vida cuando se detienen en las esquinas con la intención de cruzar la calle.
El autor de Algunas nubes, Sintiendo que el Campo de Batalla, Ernesto Guevara también conocido como el Che, y otras obras históricas –sobre Juárez y Pancho Villa- y policiacas, calificó de autoritario y represivo el gobierno de Peña Nieto.
“Es la maligna combinación del proyecto neoliberal que nos soltaron encima, de una manera cruel y la sensibilidad que creó con el poder autoritario y represivo, y la falta de credibilidad que tiene”, sostuvo.
Dijo que algunas encuestas indican que alrededor del 57 por ciento de la población está en contra de la Ley de Energía, pero al gobierno ni a los legisladores les importó. A esto se agrega la crisis de credibilidad, la violencia, los asesinatos, la represión, fosas clandestinas y desapariciones como la de los 43 normalistas de Ayotzinapa, en el estado de Guerrero.
“Habla un funcionario en televisión y nadie le cree cuando habla de justicia, porque el sistema está en un nivel de credibilidad francamente desgastado y derruido, pero además las organizaciones militantes de Guerrero presentaron familiares de las primeras fosas, ¿Cómo es posible que el gobierno haya tardado cuarenta días en enfrentar el problema?, ¿hay muertos porque la sociedad ejerce presión y sí importan, y hay muertos que valen madre? No, por favor”.
—Esta situación de crisis alcanza a los partidos políticos. Tú hablabas de un PRD y lo llamaste “cadáver tóxico”.
–Básicamente el PAN ha sido relativamente indemne a esto, en la medida en que no se ha conectado el oxígeno ciudadano con la guerra loca de (Felipe) Calderón, con lo que ahora está pasando. El PRI está quemado por todos lados, y el PRD se fue entre las patas, es tóxico. Creo que hasta ahí llegan.

–¿Hace falta autocrítica de la izquierda mexicana, incluido Morena, sobre todo esto?
–Creo que la autocrítica de Morena debe hacerse en los hechos: hay que sumarse a los movimientos sociales, sin condiciones, pa’lante, y tiene que separarse rápidamente del PRD porque el PRD es tóxico, y se ha convertido en el partido de los mentirosos, los solapadores, de los cuidadores del patio trasero del aparato del Estado.
Cuando la última declaración de Navarrete en momentos como este, es una carta dirigida a los diputados perredistas para que apoyen al teletón… no mames. Digo, hasta dónde van a llegar en el camino de la ignominia. A saber, ya no hay límites.
–¿Esa izquierda debe pedirle perdón a los mexicanos?
–Esa izquierda debe irse. Esa izquierda debe irse porque ya no tiene consistencia histórica y Morena debe probar en los hechos el derecho a estar en esta sociedad, a su lado.
–Dijiste hace rato que merecemos otro país y vemos este movimiento de jóvenes, los del politécnico, Ayotzinapa…
–Es esperanzador, yo diría que sí. La reacción de muchos sectores de la ciudadanía, que es creciente, es esperanzadora.
–¿Hay un riesgo de que se caiga en el caos o bien de que esto se canalice a favor de justicia y democracia?
–Alguien me decía alguna vez que la ingobernabilidad esto o lo otro. A mí no me preocupa que este país no sea gobernable por unos canallas que no saben gobernar, a mí no me angustia. Los ladrones sí, y esos  están en Los Pinos, ahí está el caos. ¿Cómo puedes llamar a un gobierno que lanza siete leyes antipopulares y que luego cierra el camino de la consulta? Agárrate. No solo lanzan las leyes sino que impiden que la población se exprese sobre ellas. Ya tiene mucha jeta ¿no?