CULIACÁN.-Luis Ignacio Ayala le volvió a ganar otro round a Omar Canizales, el presidente de la Liga Mexicana del Pacífico (LMP) que cometió la tontería de engancharse con el Chicote con alusiones personales que ya son escarnio público en las redes sociales y que mínimo le costarán un ‘jalón de orejas’ de la asamblea de la Liga.
En vez de mostrarse mesurado e inteligente como René Arturo Rodríguez (que prefirió no opinar nada), Canizales dijo que “Luis Ignacio tiene un ego muy grande”, cuando en realidad los dos lo tienen y por eso es que chocan públicamente.
Sin embargo, hay una gran diferencia entre uno y otro. Ayala sigue siendo Ayala. Irreverente, echado para adelante (para algunos bravucón) y a quien ciertamente le gusta ser el centro de atención. Eso no es nada nuevo y de hecho, por esa forma de ser, es que los aficionados y los medios simpatizan con el mochitense.
Pero Canizales —de quien uno de sus ex colaboradores me dijo hace días que es “la persona más hipócrita que he conocido”—, no pudo ni siquiera responder categóricamente cuando, acorralado por la colega Beatriz Pereyra-, le pidió que mostrara los controles antidoping que aseguran hacer a los peloteros en la LMP.
Canizales le respondió a Betty que sólo si los presidentes se lo autorizan entregarán esa documentación, lo cual es otra mentira más del directivo.
La LMP sí llegó a realizar exámenes antidoping durante una temporada bajo la supervisión de la Comisión Nacional del Deporte (CONADE) —cuando dio positivo Rubén Rivera y otros peloteros—, pero desde hace tres o cuatro años los hacen en laboratorios locales de cada plaza (en Culiacán, por ejemplo, en Delia Barraza).
No obstante, Canizales está tratando de engañar a la opinión pública porque no hacen análisis de esteroides ni anabólicos, como en la Liga Mexicana de Beisbol, ligas menores y Grandes Ligas. Sólo realizan exámenes de drogas de abuso (mariguana y cocaína), de tal forma que nadie sale positivo y si así fuera, tal vez ni lo boletinan a los medios.
¿Por qué? simplemente porque es pura simulación y se trata de un delicado tema de salud de los peloteros, que a la LMP no le interesa limpiar.
ROLETAZOS:
*MUY BIEN le fue a los integrantes de los Naranjeros que ganaron el campeonato de la LMP y la Serie del Caribe celebrada en Isla Margarita, entre ellos al refuerzo de los Algodoneros, Zelous Wheeler, quien en las próximas semanas buscará quedarse con los Yankees de Nueva York. Y es que cada pelotero recibió 60 mil pesos por el título en la LMP, así como 2 mil 915 dólares por el clásico caribeño que le ganaron en la final a Puerto Rico.
*ESTAMOS HABLANDO de una cifra total cercana a los 100 mil pesos. También hubo dinero para el batboy, el chofer del autobús, masajistas y médicos, aunque en menor cantidad. Con este tipo de incentivos se busca evitar que los equipos ofrezcan dinero extra a sus jugadores para los playoffs, pero a decir de Luis Ignacio Ayala, todos los clubes (o casi todos) lo siguen haciendo.
