La tarde de este jueves, un nuevo sismo de 4.3 grados Richter sacudió el centro de Italia, principalmente la localidad de Amatrice, la más devastada hasta el momento, y donde suman ya 247 víctimas mortales.
Muchas personas amanecieron asustadas el jueves, tras pasar la noche en automóviles o tiendas de campaña, mientras la tierra seguía temblando bajo sus pies, ya que cientos de réplicas siguieron al sismo. Dos de ellas alcanzaron magnitudes de 5,1 y 5,4, justo antes de la salida del sol.