Personal de la Auditoría Superior del Estado llegó a las instalaciones del Acuario de Mazatlán.
Lamberto Sauceda, quien es auditor en la ASE, negó que su visita tenga el objetivo de hacer una revisión a las condiciones en las que se encuentra el Tiburonario, el cual colapsó, ocasionando el derrame de 2.5 millones de litros cúbicos.
Su presencia y la de seis personas más, agregó que obedece a una auditoría del segundo semestre de la anterior administración.
Sin embargo, ingresó al inmueble junto con un integrante del Colegio de Ingenieros.